Jay, un padre viudo y su pequeña hija con la que no puede conectar desde la muerte de su madre, se ven obligados a tomar refugio en su pequeña tienda de abarrotes al empezar el brote de una extraña enfermedad. Esta nueva infección hace que las personas sufran de una comezón extrema que los lleva a hacerse daño en a piel y enloquecer, atacando también a las otras personas que los rodean.

Al principio la tienda parece ofrecer un buen lugar para resguardarse del caos que se esta dando en las calles, ya que los servicio de emergencia se declaran inoperables hasta nuevo aviso, y se ha impuesto una ley marcial, donde todo individuo en las calles con rasgos de estar infectado será eliminado. Sin embargo, Jay y su hija descubrirán que las otras personas que se encuentran encerradas con ellos pueden convertirse también de un momento a otro en una amenaza mortal.

Esta es la premisa de “ITCH!” el nuevo filme de Bari Kang ( Lucky, Scrapper), un drama que se sitúa en un mundo apocalíptico, y acaba de ser exhibido en el festival “Dances with Films NY” en Nueva York.

Mientras que la premisa se puede sentir como una versión más de filmes como “La Niebla” o un episodio de “Walking Dead”, Kang hace un muy buen trabajo dándonos una historia con su propio giro y méritos, con personajes interesantes, con pocos pero muy efectivos efectos especiales prácticos, y un buen uso del tiempo de duración, llevando un ritmo estable, que va acelerando la tensión poco a poco.

Sin duda este filme puede una inspiración para muchos que quieran hacer un filme. No creo que Kang haya tenido un gran presupuesto, pero sin dudas le sacó el mejor provecho a todos los que recursos que tenia a la mano y se ve que le metió mucho corazón en este trabajo, donde aparte de dirigir y escribir, hizo el papel protagónico como Jay.

Un detalle que me pareció interesante es que cuando hay momentos donde vemos gore, la imagen se torna al estilo de los filmes Grindhouse (para referencia mas rápida, piensen en “Planet Terror” de Robert Rodriguez), mientras que en el resto del filme la imagen es en un formato mas tradicional. Esto no fue algo que me distrajera demasiado, pero me hacia dudar si ver este filme como una historia del corte indie Grindhouse o verla con ojos de algo mas mainstream. Esto puede que a la audiencia no le importe, pero si me resaltó bastante.

Por suerte la cámara nunca exagera con su pulso libre y siempre podemos entender lo que está pasando, lo agradezco porque muchos creadores usan el recurso de la “Cámara Borracha” en escenas de acción, pero mas que nada para disfrazar malas coreografías o fallas en los efectos especiales prácticos. Otra cosa muy destacable fue la música. La banda sonora me pareció muy buena y acentuaba muy bien las escenas de tensión y acción.

Todos los personajes adultos en pantalla tienen sus propios secretos y demonios a conquistar, y como podrán imaginar, a veces van a salir a relucir en los peores momentos. Esto da oportunidad de que algunos personajes crezcan y ganen un tipo de redención, sin embargo también hay momentos que el guion nos da un par de detalles que hacen que otros no terminen de encajar. Esto se ve mas en concreto en la historia de Miguel, un empleado de la tienda de Jay que junto con su sobrina tratan de dar una capa extra al drama y la tensión al estar encerrados con Jay y su hija, pero un par de cosas no me parecieron lógicas y me empezaron a causar ruido, más como un inmigrante. No puedo decir mucho por spoilers, pero igual puede que muchos no les importe.

Por desgracia, si hubo unos detalles que creo le hicieron daño al filme. En concreto me refiero a la actuación.

Hubo unas actuaciones que me parecieron MALAS. No me gusta enfocarme en los puntos negativos, pero tampoco puedo ignorar que varias lineas y su entrega se sintieron PLANAS, sin emoción, y era en momentos donde se debería mostrarse mucha tensión, desesperación y otras emociones. Otra vez, por cuestiones de spoilers no puedo decir DONDE, pero cuando vean esas escenas estoy seguro las van a ubicar.

Hay lineas que me hicieron pensar que los actores las improvisaron, porque no solo no hacen sentido, sino que no suenan naturales (Y no se deben a la barrera del idioma), si alguien fuera de la producción le hubiera dado una releída a ciertos diálogos, estoy seguro hubiera notado como sobresalen (negativamente) en la escena y los hubiera cambiando.

Normalmente puedo dejar de lado cuando un filme tiene malos efectos especiales, malas actuaciones o mala edición siempre y cuando el filme no cometa el peor pecado: Ser aburrido. Afortunadamente “Itch!” me mantuvo atento todo el tiempo, y me gustó bastante, pero si siento que esas malas actuaciones le hicieron daño al producto final. Estoy consciente que este filme no tiene grandes presupuestos ni actores de renombre y claramente usaron al máximo los recursos disponibles, pero me pareció que había que mencionar ese problema.

Este es el primer trabajo de el director Bari Kang en el subgénero del terror y me parece que lo hizo muy bien. “Itch!” es un muy buen ejemplo de que se puede contar una muy buena historia de terror sin grandes efectos especiales, muchas locaciones ni grandes estrellas, y creo que muchos deberían tomarlo como ejemplo.

Definitivamente, denle una checada.

“Itch!” es el tercer filme de Bari Kang (quien también escribió el guion), producido junto Mónica De Oliveira. En las actuaciones tenemos a Bari Kang, Olivia Kang, Patrick Michael Valley, Ximena Uribe Vargas, y Maria Ventura Lucas.