Tratando de rehacer su vida después de haber escapado de un culto secreto, Kathie encuentra empleo como asistente en un centro de atención para adultos con necesidades especiales, y poco a poco parece que Kathie va logrando encontrar un poco de paz consigo misma al ayudar a los pacientes de el centro, pero al conocer a Stephanie, una adulta con síndrome de down, Kathie empieza a tener alucinaciones y flashbacks a esos días en el culto.
Al ver que Stephanie repentinamente se empieza a enfermar y que aun recibiendo ayuda médica no mejora su salud, Kathie empieza a sospechar que una presencia maligna esta acechando a Stephanie, por lo que haciendo uso de los rituales que aprendió por medio de el líder de el culto para alejar a los demonios, la intenta proteger, pero esta entidad podría ser mas poderosa que los conjuros que Kathie puede consultar en su libro.
«Dementer» tiene muchas cosas interesantes y claramente es un proyecto muy personal de el director Chad Crawford Kinkle (Quien antes nos habia traído una excelente película llamada «Jug Face»), En esta ocasión Kinkle trae a la pantalla a su propia hermana Stephanie Kinkle, que en realidad padece de el síndrome de Down, para darnos un relato de suspenso muy efectivo. Contrario a lo que se podría esperar, Stephanie y los demás adultos con condiciones mentales que aparecen el filme no son usados como chantaje emocional, ni como seres monstruosos o de los que debemos temer, sino como personas ordinarias, que por azares de el destino, se hallan como el blanco de una presencia maligna, sin darse siquiera cuenta de ello.
Y con el personaje de Kathie, «Dementer» nos presenta muy hábilmente la pregunta «¿Cuando estamos realmente ayudando a alguien y cuando estamos poniéndolo en un peligro aun mayor? Las medidas extremas a las que Kathie recurre para tratar de ayudar a Stephanie de lo que percibe como una amenaza sobrenatural, nos hace cuestionar si no es realmente Kathie la que ocupa ayuda o si esos días con el culto la habrán dejado mas dañada de lo se podría creer. Personalmente a mi me inquietó mucho la idea de que una persona con discapacidades esté en peligro y no pueda ni siquiera darse cuenta de ello, ya no digamos que no pueda comprender cuando alguien la quiera ayudar y no pueda hacérselo entender hasta que ya es demasiado tarde. El filme aprovecha muy bien ese sentimiento de impotencia (por parte de Kathie) y no se toca el corazón para explotarlo.
Las actuaciones son muy convincente y los personajes se siente muy reales, como las personas con las que convivimos en nuestra vida diaria. Hay momentos donde me imagino que alguien solo soltó la cámara y nos presento el día a día de los adultos en el centro de cuidados especiales, mezclando delicadamente la historia de Kathie y Stephanie. Mucho de le filme cae en los hombros de Kathie Groshong (Jug Face, A measure of the Sin) y sin problemas nos vende su personaje de Kathie, alguien que esta tratando de dejar atrás su tormentoso pasado, y busca ayudar a Stephanie sin saber que le podria costar lo poco que ha ido recuperando de su vida.
El filme cuenta con un diseño de sonido muy peculiar, que logra aumentar la tensión en varios momentos, por lo que recomiendo ver este filme con un buen sistema de sonido. Hay momentos donde podemos escuchar la voz de el líder de el culto (Interpretado genialmente por Larry Fessenden) en tonos muy suaves que son a momentos arrulladores y en otros, acompañado de sonidos ambientales, se vuelven realmente inquietantes.
En este filme no hay sustos de pianazos, y casi no hay gore, lo cual recalca que este no es un filme de terror tradicional de los que recientemente llenan las pantallas, pero usa muy hábilmente su duración de menos de 90 minutos para contarnos una historia muy interesante, con una premisa muy origina y logra mantenernos interesados. Vale la pena verla un par de veces.
«Dementer» acaba de tener su estreno mundial en el Nashville Film Festival este 10 de Octubre, así que estén pendiente para cuando este disponible para el resto de el publico. El filme fue escrito y dirigido por Chad Crawford Kinkle y cuenta con las actuaciones de Katie Groshong, Stephanie Kinkle, Brandy Edmiston, Eller Hall, y Larry Fessenden